Regados por los llanos de San Pablo Jolalpan, municipio de Tepetlaoxtoc, existen tlateles, montículos de origen humano, que formaron una ciudad de tamaño nada menor para su época. Los restos de la ciudad abandonada dieron paso a campos de cultivo.
“Arando la tierra salieron los ídolos”, dice Miguel Osorio, gestor cultural, que me muestra una pequeña vitrina con decenas de fragmentos de cerámica antigua. Junto a ella hay yuntas, reatas, costales y arados. “El museo estaba pensando para tener implementos agrícolas, pero los vecinos encontraron estas piezas cuando sembraban”.
Por el rumbo del panteón de San Pablo inauguraron el Museo Comunitario Profesor Pedro Javier Jiménez, nombre que toma del creador del concepto, quién acondicionó el espacio con recursos propios. “No recibimos apoyo gubernamental, aunque sí lo estamos buscando”, dice el profesor Pedro.
Profesor Pedro Javier Jiménez.
El cadente sonido de un tambor hace que varios danzar a varios miembros de la mexicanidad, algunas personas los observan, a unos pasos hay niños jugando y otras personas lubrican su charla con pulque. Una de ellas me ofrece uno. “Pásele, qué bueno que viniste”. Dos tragos al pulque y veo los murales que visten al museo por fuera: el profesor Pedro en tamaño gigante y parte de su familia en un costado, algunas imágenes tomadas del códice Ixtlilxóchitl y un Xólotl triple, una representación del Dios, un xoloitzcuintle y un guerrero. “Pero Xólotl no usaba cuatepoztli ni macuahuitl”, se oye de alguien.
El pulque ya se terminó y me meto al museo, esquivando al público que sigue atento a la danza. Miguel Osorio me ataja y me invita a pasar. La primera sala esta llena de implementos del campo y su cosecha, no la comestible, sino las piezas prehispánicas que se han encontrado en las sementeras.
La segunda sala llena los altos muros con fotos, algunas de Tepetlaoxtoc y reproducciones de otras famosas. Hay sillas de montar, electrodomésticos antiguos y un traje de charro con la leyenda “El Bola”, ¿será de uno de los vecinos de San Pablo apodado así?
“No te vayas, pásale a comer de una vez, ya están dando” y me siento en la parte posterior de la casa, donde ya hay una pequeña multitud comiendo arroz, mole verde, rojo, tlacoyos y carne de puerco y pollo. Mi lugar lo encuentro junto al horno de barbacoa, desde donde puedo ver unos burros y unas vacas. Este sitio también es un pequeño rancho.
Me despido del profesor Pedro, quien me dice que espera mejorar las condiciones de la exhibición. Les hacen falta vitrinas, cédulas y organizar diferente las colecciones, pero confía en que pronto puedan avanzar, con la ayuda de todos.
En 1997, el arqueólogo Williman Sanders escribía que habíamos perdido la gran oportunidad de preservar e investigar los tlateles de Jolalpan porque la mancha urbana estaba creciendo sobre ellos. Su artículo se llamó “El final de la gran aventura”. Este Museo Comunitario pareciera decirnos que aún no es el final, pero debemos apurarnos.
Museo Comunitario Profesor Pedro Javier Jiménez. Avenida El Panteón S/N, San Pablo Joalalpan, Tepetlaoxtoc. Horario: Sábados y domingos de 10:00 a 17:00 hrs. Costo: Cooperación voluntaria.
Fotos y texto: Ernesto Sánchez
